El arroz procede de una planta herbácea de la familia de las Poaceae o Gramíneas. Esta planta se cultiva en China desde hace más de 5.000 años.
Los árabes lo introdujeron en España y lo cultivaron con éxito. También se cultiva en Grecia, Turquía, Rumanía, Hungría e Italia. Un dato muy curioso es que en el pasado era carísimo y se consideraba un producto de lujo.
El arroz contiene más de un 70% de hidratos de carbono. También es fuente de minerales y aporta vitaminas como la D y las del grupo B.
Previene la obesidad, ya que no contiene grasas dañinas. Controla la presión arterial al ser bajo en sodio, ayuda a frenar la diarrea y
favorece el metabolismo.
Es rico en fibra, muy especialmente el arroz integral, por lo que evita algunos tipos de cáncer como el colorrectal y el intestinal. Fortalece el sistema inmunológico y el correcto funcionamiento de los órganos.
«Las proteínas que lleva participan en la formación y reparación de los tejidos musculares, manteniendo en buen estado las uñas, pelo y piel. Se le considera un alimento perfecto para tratar problemas como las quemaduras, acné o sarampión», informa el periódico digital Okdiario.
En España se consumen aproximadamente 184,8 millones de kilos de arroz. Si quieres preparar paella puedes escoger el arroz Albufera, ya que una vez cocido, mantiene la textura firme, pero cremosa.
El arroz bomba también es una de las variedades más usadas por su buena resistencia a la sobrecocción. Otra opción es el arroz redondo, aunque su cremosidad es menor. Te aconsejamos que para preparar paella evites los arroces de grano largo.
Existen unas 80.000 variedades de arroz y es el segundo cereal más producido del mundo. Las regiones asiáticas apuestan por este alimento para preparar sushi.
Varios estudios científicos han descubierto que su consumo contribuye a reducir los niveles de colesterol LDL, gracias a su composición rica en ácidos grasos omega-3.
Los profesionales de Pelican Restaurant, expertos en cocina japonesa, explican que existen cientos de variaciones en la gastronomía japonesa, como por ejemplo el onigiri, el maki-sushi o rollos de sushi envueltos en alga marina.
«Y en los últimos años su ingesta ha crecido en los países occidentales, al aumentar el número de personas intolerantes al gluten o celíacas, que recurren al arroz para comer pasta, pan y dulces sin riesgo», informa el diario La Vanguardia.
Para preparar esta receta los cocineros congelan el pescado fresco a -20ºC durante una semana. Si quieres preparar sushi debes tener cuidado con la cocción del arroz, porque debería quedar blando y apelmazado, pero con un núcleo algo duro.
Opta por un arroz glutinoso, especial para preparar sushi. Te aconsejamos que impregnes un poco el sushi en la salsa de soja.
Los expertos explican que es una fuente de antioxidantes naturales y cuenta con una alta concentración de proteínas vegetales y calcio.
El wasabi hay que ponerlo directamente en el sushi. Debes saber que ayuda a fortalecer el sistema inmunitario y cuenta con un alto contenido en antioxidantes.
En la elaboración del sushi se utiliza también el alga nori en láminas tostadas. Debes saber que las algas nori aportan vitaminas, minerales, proteínas, hidratos de carbono y clorofila.
El sushi no se come con palillos, sino con la mano. Sin embargo, para degustar sashimi o una sopa, sí necesitas palillos. El sashimi es un trozo de pescado, habitualmente de atún o salmón, que se sirve solo.
También se utiliza el arroz para preparar el onigiri. Se trata de una bola de arroz que puede ir rellena de pescado, carne o verduras y que se envuelve con alga nori.
Suele tener forma triangular u ovalada. No se trata de una variedad de sushi, ya que entre ambos platos hay una diferencia. En el onigiri el cocinado es sin condimentos, pero en el sushi apreciarás el vinagre y la sal.
El onigirazu, se trata de un especie de sushi, pero en forma de sándwich. Para preparar este plato los japoneses utilizan el arroz y el alga nori para crear dos mitades de un pan de sándwich.
Los orientales son los mayores consumidores de este cereal, porque su filosofía establece la creencia de que tomar arroz ayuda a abrir el apetito y cura enfermedades.
El arroz arborio o carnaroli es idóneo para elaborar risottos, por su cremosidad y facilidad para absorber mucho líquido. Se trata de un tipo de arroz de tipo japónico de grano corto, de procedencia italiana. Es un grano de forma redondeada y de color blanco perlado.
Pero, si te encanta el arroz con curry de verduras puedes optar por el arroz jazmín. Es de grano largo y fino y proviene de Thailandia.